En las últimas semanas la realidad platense estuvo atravesada las 24 horas en todas sus capas vitales por la inundación devastadora del 2 de abril.
Las calles del casco urbano continúan dando huella de la correntada de agua que arrastró el esfuerzo, el trabajo y la vida de los ciudadanos. Los barrios de la periferia continúan con aguas estancadas y sobreviviendo gracias al trabajo muy comprometido de la gente, de organizaciones sociales, barriales, sindicales, jóvenes…
El universo de la inundación, como un micromundo específico de la región La Plata, Berisso y Ensenada, se reparte en diferentes planos que, aunque con diferentes signos, están todos embadurnados de ahogo.
Las palabras cuerpo, perdí, frio, nada, muertos, muerta, muerte, contaminación, agua, colchón, comida, mienten, se reciclan al infinito en cada casa, en cada lugar de trabajo, en cada almacén, quiosco, escuela…
Confusión, pérdida, dolor, bronca, resignación, desorden, desorganización, agotamiento,… obturan a cada uno de los inundados y a quienes los asisten hermanados en seguir intentando recuperar algo de lo que quedó.
Uno de los planos que atraviesa fuertemente todo este vértigo es la comunicación, circulan por los medios masivos, informaciones tanto útiles, como inútiles; las redes sociales están atiborradas de publicaciones de todo tipo que dificultan los criterios de selección y réplica; la gente comparte en sus muros lo que compartió el amigo del amigo y minutos más tarde se entera que esa información es falsa. Fuentes anónimas, informaciones distorsivas, peleas mediáticas, mentiras y desmentidas públicas, sobreabundan, ahogan…
Una línea de comunicación paralela aparece como los gomones que esperaban los inundados: redes comunitarias, especialmente radiales, que a la vez que asisten a los barrios, registran sus realidades, sus necesidades y desde el primer momento fueron una de las claves para enhebrar la solidaridad que se multiplicó espontáneamente en cada vecino, en cada platense que necesitaba saber a dónde ir a ayudar, barrio por barrio, casa por casa, escuela por escuela.
Entrevistamos a Pablo Antonini, integrante de Radio Estación Sur de la red de radios comunitarias FARCO y a Fernando Gomez de Radionauta, que funciona en el Centro social y Cultural Olga Vazquez donde se armó la Brigada Voluntaria Hugo Chavez que tuvo una participación masiva en la asistencia de víctimas de la inundación en los Barrios más afectados de La Plata, Berisso y Ensenada.
Las entrevistas intentan ser un aporte en la reflexión que nos ayude a problematizar el rol de los medios y de la comunicación ante una situación como ésta.
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