Hacia el XXVIII Encuentro Nacional de Mujeres en San Juan
En el marco de las jornadas previas al Encuentro Nacional de Mujeres, Silvina Calveyra, Coordindora del Departamento de Género de la regional Entre Ríos de la CTA, dialogó con ACTA sobre la situación de su provincia. Se refirió a las luchas que se están dando conjuntamente con las mujeres empleadas domésticas y el acompañamiento a las víctimas de trata para la explotación sexual.
-¿Cómo evalúa la situación de las mujeres en Entre Ríos?
– Desde nuestra organización vemos un salto cualitativo respecto de los trabajos realizados en materia de prevención. Venimos haciendo capacitación y visivilizacón de la vulneración de derechos humanos que habla de la relación de poder entre el varón y la mujer, relegando a las mujeres a una situación de sumisión. Hablamos de violencia en todas sus formas: violencia domestica, violencia matrimonial, violencia psicológica, violencia física que deriva en femicidos. En Entre Ríos tenemos una taza muy preocupante de muertes de mujeres en manos de sus parejas. Y es una estadística que crece año a año. Por otro lado, lo que hace a la violencia laboral; el maltrato, la precarización, la persecución, la discriminación que sufren las trabajadoras en sus lugares de trabajo, incluso en dependencias del Estado. Por otro lado, lo que hace a la mayor explotación que es la trata de personas y la explotación sexual y comercial, no contamos con casas refugios para víctimas de trata en la provincia. Por eso no queremos hablar de trata como una cuestión aislada sino que es preciso nombrarla como crimen organizado.
-¿Qué luchas están dando al respecto?
– En materia de trata, hemos pasado de la prevención y visibilización a estar en la incidencia territorial, en la intervención y acción directa: acompañando las denuncias, a las mujeres, a las víctimas. Tratamos de incidir en la implementación de políticas públicas, hemos generado distintas normativas como la ordenanza que cerró todos los prostíbulos en la ciudad de Paraná. Con la cooperación de legisladores, hemos llevado adelante la ley provincial que crea un consejo y lleva un seguimiento respecto de la situación de trata de personas y explotación sexual. Respecto del trabajo sexual, somos abolicionistas, no creemos que sea un trabajo porque no hay una relación de igualdad entre el hombre y la mujer. No hay un contrato de trabajo. En este sentido, hacemos un seguimiento de los avisos clasificados, vemos que el decreto no se está cumpliendo porque salen enmascarados en la figura de masajistas, terapeutas, etcétera. Hoy en día contamos con un montón de legislación, pero el Estado no está bregando para su cumplimiento, lo cual hace que sean puramente testimoniales. Faltan políticas públicas y, a la vez, decisión y voluntad de hacerlas efectivas.
Otro de los temas que venimos trabajando desde la provincia y organizados a nivel nacional es el tema del narcotráfico, y esta ley de blanqueo de dinero hace que le abramos el camino legal a los tratantes, a los proxenetas, a los narcotraficantes. Y en el plano gremial, acompañamos a las compañeras empleadas de casa de familia. Con la nueva ley, ellas tienen una regulación que la equipara a cualquier trabajador, la saca de cualquier situación de informalidad. En este sentido tratamos de concientizar e informar a las compañeras y a los empleadores.
-¿Cómo avanzan las luchas en defensa de los bienes comunes?
– Respecto de las problemáticas de los bienes comunes, en nuestra provincia estamos tratando de frenar el desmonte por el tema de las termas que se quieren construir en Paraná, tambien integramos el movimiento Entre Ríos libre de fracking. A través de una movilización popular, hemos frenado el intento por privatizar nuestras islas.
Fuente: Agencia CTA