Prensa de ATE

Este lunes, en el Anfiteatro Eva Perón de ATE, se realizó el acto de cierre del primer módulo de la Diplomatura en Feminismo, Trabajo y Políticas Públicas, que se implementó a partir de un convenio entre el Consejo Directivo Nacional, su Departamento de Género, la Secretaría de Formación, el Idep-Salud y el Instituto Interdisciplinario de Género de la Facultad de Filosofía y Letras  de la UBA, y en el que participan más de 150 trabajadorxs de ATE y la CTA Autónoma.

En el encuentro, Mónica Tarducci, coordinadora de la Diplomatura, realizó una evaluación  del primer tramo y presentó a lxs docentes que continuarán el próximo año, quienes dieron una introducción a los temas de sus respectivos ciclos, Jésica Croce  (Violencia de Género) y Marcelo Zelarallán (Educación, Sexualidad y Derechos).

Además, se entregaron los certificados de asistencia a quienes completaron la etapa y se compartió un brindis y un cierre musical, a cargo de Fernando Tomasenía, trabajador de la secretaria de Cultura, y Gaby Comte, quienes interpretaron canciones de música popular latinoamericana.

Hugo “Cachorro” Godoy, Secretario General de ATE, abrió el acto destacando el encuentro entre universidad y sindicato: “Hoy recibimos la noticia de que el Gobierno de la Ciudad  sancionó una ley en la que saca a los licenciados y licenciadas en Enfermería de la carrera profesional. Así, mientras nosotrxs trabajamos en elevar nuestra calidad profesional, el Gobierno devalúa la formación”. Sin embargo, afirmó, “estos hechos nos reafirman que el camino que tomamos es el correcto”.

“Esta Diplomatura habla de lo que entendemos por Estado, porque lo que estamos haciendo con este convenio demuestra la posibilidad de una relación más democrática entre las universidades, que son parte del Estado Nacional, con las organizaciones libres del pueblo, para ponerse al servicio de las mayorías populares”, añadió el dirigente.

El objetivo del ciclo es brindar a lxs trabajadores una formación en género para que, partiendo de estos conocimientos, puedan producir reflexiones que impacten directamente en sus prácticas e incidan en las políticas públicas.

En esa línea, Tarducci resaltó que “género es una categoría para analizar de forma más justa la sociedad, así como lo son la clase o la etnia”. Entonces, señaló, “es fundamental para reflexionar lo que pasa en el mundo de trabajo”.

Asimismo, habló de la importancia de recuperar la Historia del movimiento para “derribar mitos, como que el feminismo es burgués”, y conocer “cómo se produjo el conocimiento feminista, cómo las mujeres en las calles hicieron que hoy hablemos de esto”. “Es importante valorar el movimiento social porque que podamos hablar de género es la expresión de 200 años de lucha”, subrayó. Por último, destacó que en la Facultad de Filosofía haya una gestión que coincida en la importancia de sacar a la universidad a la calle y agradeció a Marcela Romano, quien acercó la propuesta del convenio que posibilitó la Diplomatura.

Por su parte, Daniel Godoy, de Idep Salud enmarcó el desarrollo de la Diplomatura en las distintas experiencias que se vienen articulando con distintos espacios del gremio y otras instituciones, en un esfuerzo colectivo por avanzar hacia la materialización política de la idea de construir un espacio universitario vinculado a lxs trabajadores. Entre esas iniciativas está el lanzamiento de la Licenciatura en Enfermería junto a la Universidad Jauretche. «Por eso, levantamos desde hace tiempo la consigna «camino a la universidad de lxs trabajadores», para mantener viva esa intención». En tanto, evaluó lo hecho en la Diplomatura y en la Licenciatura como «experiencias muy exitosas», que «vamos a profundizar en 2019».

“Esta es una semilla que va a germinar”

Una treintena de estudiantes hicieron una devolución del ciclo que estuvo a cargo de Tarducci y las docentes Inés Vázquez y Catalina Trebisacce.

“La Diplomatura me enseñó que ser feminista es algo muy profundo”, comenzó Estela, quien habló de los conflictos que vivió, por ser mujer, cuando era militante de una organización social. “También a valorar la lucha de las mujeres que estuvieron antes, que fueron invisibilizadas, porque siempre nos enseñaban movimiento obrero, pero el de los hombres”, dijo y destacó la importancia que el conocimiento se multiplique en los territorios, “para derrocar al sistema patriarcal”.

Julieta, de 20 años y estudiante de Comunicación Social en La Plata, contó: “Mi feminismo nació con Ni Una Menos, pero necesitaba nutrirme con la historia del movimiento”. Silvia, de Mercedes, dijo que decidió empezar la Diplomatura para ir más preparada al Encuentro de Mujeres en Trelew, y admitió: “Me parecía que la lucha empezaba hoy y no, viene de hace tantos años. Ahora tenemos que pensar cómo seguimos”.

Adriana Arce, delegada de ATE Educación en Mar del Plata, explicó que su objetivo es “replicar en cada seccional lo aprendido”, y contó que ya vienen haciendo seminarios en Mar del Plata a partir de lo que aprendemos”.

“Queremos construir un feminismo de clase”

Marta Galante, Directora de Género de ATE Nacional, habló de la importancia de que la universidad se acerque al sindicato, para que muchas compañeras, que no cuentan con estudios, puedan acceder a cursar una Diplomatura dentro del mismo gremio. También resaltó la participación de cada una y cada uno, que junto a las docentes y desde el diálogo, fueron aportando y construyendo conocimiento colectivamente.

Asimismo, remarcó que el tramo de formación “haya surgido en un año en el que las mujeres hemos tenido un rol más que significativo, porque empezó el 6 de agosto, días antes de esa gesta que se hizo en el país que fue el pañuelazo verde”. Y añadió: “Profundizar en torno a aquellos derechos que nos falta conquistar iguala hacia arriba, empodera y abre nuevas expresiones para poder cambiar el pensamiento patriarcal y machista que muchas tenemos”.

Por último, indicó: “Estamos muy contentas y esperanzadas de que el año que viene se incorporen más compañeros varones porque el feminismo no es una cuestión de mujeres”.

Finalmente, Silvia León, Secretaria de Organización de ATE, expresó: “La Diplomatura es un pilar fundamental en el proceso que estamos viviendo en el feminismo, en el  movimiento de mujeres y en el sindicato, porque como mujeres sindicalistas tenemos el desafío de construir sindicatos feministas”. Y añadió: “Desde ATE decimos que estamos reinventando el sindicato y para nosotras no es posible un sindicato transformador y revolucionario si no es feminista”.

Así, porque “la pelea feminista no es solo pelear por derechos en un modelo capitalismo de opresión y desigualdad, sino que además es tomar la fuerza transformadora y revolucionaria para cuestionar ese modelo y luchar por la transformación de las estructuras”. Para eso, “necesitamos deconstruirnos como hombres y mujeres, y  repensar nuestras identidades porque seguimos siendo machistas y los varones sosteniendo lugares de privilegio”.

“Y también  es crucial conocer la Historia, de dónde venimos, saber de cada proceso de ruptura que en distintos momentos y lugares, sea en Europa, Estados Unidos o América Latina fueron construyendo las mujeres y el feminismo en la lucha. Porque queremos construir un feminismo de clase”, concluyó la dirigente.