Mientras algunos empresarios retacean productos con fines especulativos, 300 cooperativistas nucleadas en el MTE fabrican barbijos para donar a un hospital de niños. “Al coronavirus le ganamos entre todos, y este es nuestro aporte”, cuenta Mariela Molina, una de ellas.
Redacción Canal Abierto | “Voy a poner a la AFIP, al Ministerio de Trabajo y a Defensa de la Competencia a perseguir a los especuladores”, advirtió en las últimas horas Alberto Fernández.
Las noticias sobre la propagación del coronavirus en Argentina encendió la alarma en el gobierno y la mayoría de la población, y disparó la demanda -y los precios- de los barbijos y el alcohol en gel. Como suele suceder en estas crisis, empresarios inescrupulosos aprovechan la ocasión para retacear estos insumos con fines especulativos.
«No voy a tolerar que unos pícaros nos tomen por bobos. El riesgo de los argentinos no puede ser negocio para nadie», dijo el Presidente este martes a Radio Metro al advertir que será «inflexible» con los castigos. En el caso del alcohol en gel -que registra faltantes en las tiendas y cuyo precio llegó a duplicarse- el gobierno ya ordenó que el valor se retrotraiga al que tenía semanas atrás.
Sin embargo, no todos buscan sacar ganancias exorbitantes del temor al contagio y a costa de los más vulnerables. Ejemplo de ello es una fábrica textil de la economía popular, la correntina “Ibira Pita”. Nucleados en el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE-UTEP), sus 300 cooperativistas (230 son mujeres) se pusieron manos a la obra para fabricar barbijos. No sólo eso: decidieron donar parte de la producción a distintos centros de salud de la provincia, como el capitalino Hospital de Niños “Juan Pablo II”.
“Subió mucho la cantidad de pedidos: empezamos con 200 y ahora estamos haciendo 500 por día”, cuenta Mariela Molina, referente correntina del sector textil del MTE. “En un principio éramos 50 trabajadores y trabajadoras, pero se fueron sumando de otras organizaciones y ahora somos más de 300”.
Al igual que la mayoría de los argentinos, Mariela explica cómo afectaron las medidas de prevención adoptadas por el gobierno: “hasta hace poco estábamos trabajando en nuestro polo textil, pero en estos días –como todo el mundo- tuvimos que cambiar algunos hábitos y muchas están trabajando en sus casas”.
“Al coronavirus le ganamos entre todos, y este es nuestro aporte”, afirma.