Profesionales de la salud que realizan su residencia en la Provincia y que trabajan en el interior realizando la devolución por un año luego de haber cumplido con un ciclo de formación, denuncian que el Ministerio de Salud les recortó la movilidad a localidades de interior. En el marco de un reclamo colectivo ante esta situación, fue despedida una pediatra.
Por el recorte de la movilidad un grupo de residentes pidió audiencia a la ministra de Salud Josefina Medrano pero aún no han podido conseguirla. Consideran injusto el despido de una pediatra en el marco del reclamo que iniciaron, además piden intervención de la Secretaría de Trabajo.
En enero la ministra, mediante un memorandum, dispuso medidas que recortan el transporte de los y las profesionales residentes que viajan al interior provincial.
Una de las residentes que habló con Salta/12, y pidió reserva de su nombre por temor a perder el trabajo, explicó que hasta noviembre el Ministerio de Salud Pública de la provincia garantizaba el transporte para profesionales que prestan servicio en el interior, la nueva gestión saencista dispuso de “manera arbitraria e injustificada” dejar de cumplir sus obligaciones respecto al traslado.
Hay profesionales de la salud de distintos lugares del país que realizan su residencia en Salta. El ciclo de formación básico es de tres años, y en el último año realizan una devolución con trabajo en distintos hospitales o centros sanitarios. Por ese motivo, en el último año el gobierno cubría los viáticos.
Otra de las modificaciones hechas tiene que ver con que antes los y las profesionales viajaban semana de por medio al interior. Ahora deben ir por 15 días y cumplir los 15 restantes en las instituciones de base de Capital.
La profesional que habló con Salta/12 indicó que esto último perjudica la labor de profesionales de psicología que asisten a poblaciones vulnerables en el interior, donde tienen “pacientes graves” a quienes no pueden dejar de acompañar por 15 días.
A raíz de la imposición de la autogestión del transporte, una de las residentes explicó que hay alrededor de 25 profesionales que han conseguido arreglos con intendencias o gerencias de hospitales para que les cubran los viáticos. Sin embargo, otros 25 residentes consideran que aunque en mayo termina su devolución, deben reclamar porque es una situación que les trasciende y también un posicionamiento político ante el ajuste.
“Trabajamos con capacitación, trabajo comunitario y asistencia clínica en consultorio”, indicó una profesional y consideró que el tiempo de permanencia que tienen en las localidades del interior es muy poco para poder incidir con cambios que mejoren el acceso a la salud de la poblaciones a las que asisten. Dijo que les asignan 6 meses en una localidad y luego les envían a otra. También planteó que faltan muchos recursos y herramientas, que hay alta demanda de profesionales de la salud y que el gobierno no tiene pensada una estrategia para la distribución de residentes.
La residente ejemplificó con que hay algunos casos en que se destinan especialistas a lugares donde no pueden desempeñar la especialidad por falta de las herramientas necesarias. Por ejemplo, dijo que hubo un caso de una tocoginecóloga enviada a Rivadavia Banda Sur, un hospital de baja complejidad donde no se hacían partos.
Despido como amedrentamiento
Una pediatra que se desempeñó en Joaquín Víctor González en el primer semestre de su devolución y este año fue enviada a Coronel Juan Solá (Morillo) fue despedida luego de haber adherido a una medida de fuerza. Los y las residentes consideran injusto el despido puesto que se trata de una profesional que tiene “el mejor promedio” de la formación y esperan que sea reincorporada.
En protesta por la falta de pago de los viáticos, los residentes habían notificado que solo cumplirían funciones en Capital hasta que el Ministerio de Salud retomara sus obligaciones de garantizar viáticos.
Luego de una nota que hicieron llegar a la ministra de Salud, con la firma de 19 profesionales, siete mujeres fueron citadas a una reunión con la jefa de Desarrollo Organizacional de la cartera de Salud, Celina Caro.
“Las hicieron pasar de a una. Al salir, las compañeras comentaron que fueron víctimas de un hostigamiento muy horrible, les preguntaban por cuestiones familiares, si tenían hijos o no y a qué escuela los iban a mandar. Les plantearon que se tenían que presentar al interior sin opción, la respuesta era que no iba a haber plata para viáticos, la oferta era que hagan guardias, para que se paguen los viáticos”, relató una de las residentes.
Ante la presión, las profesionales se presentaron a trabajar al interior, salvo la pediatra despedida a quien le había tocado el destino más lejano.
La residencias contemplan 44 horas semanales de trabajo. “Antes teníamos un plus por dedicación exclusiva, en el año de devolución nos quitaron eso. Seguimos teniendo la dedicación exclusiva porque con las horas que trabajamos se hace difícil trabajar extra en otro lado y más yendo y viniendo del interior a Capital”, sostuvo una de las profesionales.