Por una producción agroecológica en zonas periurbanas que garanticen la soberanía alimentaria
La cuarta audiencia pública se realizó el pasado miércoles 15 de octubre en el Concejo Deliberante. Estas audiencias que lleva adelante la Comisión de Medioambiente del Concejo Deliberante de Ramallo para dar paso luego a la elaboración de una ordenanza que regule seriamente las fumigaciones en nuestro distrito son un hecho sin precedentes que dan cuenta de la importancia de debatir de cara al pueblo, aquello que mucho se dice y poco se practica: democracia participativa, es lo que se lleva adelante. Si bien en la cuarta audiencia resultó escasa la presencia del público, 30 personas se acercaron al Concejo, donde unos pocos concejales de los 15 que nos representan se hicieron presentes, algunos un rato, otros comprometidos hasta el final, muestra también que muchos que deberían estar cumpliendo con su función no lo hacen, y los deja claramente en evidencia su irresponsabilidad.
El concejal, doctor Rómulo Despósito, integrante de la comisión de medioambiente se encargó en presentar a Raúl Terrile, ingeniero agrónomo de la Universidad Nacional de Rosario, con una maestría en España sobre agricultura ecológica, actualmente cumple funciones en la Municipalidad de Rosario en todo lo referente a huertas orgánicas.
El ingeniero comenzó agradeciendo por la invitación, a la red de contactos, refiriéndose a los militantes de UPVA, la ONG que trabaja lo medioambiental en nuestra zona. Expresó “me tuve que formar afuera de la facultad, ya que en Rosario la facultad es netamente sojera, no forma en agroecología”, dato relevante para tener en cuenta cuál es la visión mayoritaria de los ingenieros agrónomos en nuestra zona.
El ingeniero expuso sobre un sistema productivo agroecológico. “Para llevar un punto de acuerdo a esa dicotomía que se genera-expresó-entre los que bregan por un medioambiente sano y los que buscan rentabilidad en la producción”. “Para que el campo vuelva a ser el campo-dijo-antes decíamos, como lugar saludable, me voy al campo, hoy ya lo pienso distinto”.
Más agrotóxicos, menos puestos de trabajo
“Como todos saben lo que fue la sojización del país a través de la campaña 1995, 1996, de lo que fue la introducción de la soja transgénica RR, entonces hoy, los argentinos somos de ir a los extremos, o hacemos todo o nada, hoy somos el país que más soja transgénica tiene, porque hasta Estados Unidos se resguarda en un porcentaje. Hoy el 99% de la soja que se produce, y no sé si me queda el 1%, es de tipo transgénica. Las estadísticas nos dicen que se comercializa 400 millones de litros de plaguicidas, si lo dividimos por habitante, por persona, tenemos casi 10 litros por persona. Y es un modelo de producción que inclusive, estadísticamente realizado un estudio por el INTA, ocupa menos puestos de trabajo. Es un modelo que ahora que bajó el precio de la soja, comienzan más interrogantes”.
Pérdida de autonomía alimentaria – Fresquita la lechuguita
“Tenemos pueblos rurales amenazados por el avance de la soja, los periurbanos, ciudades medianas y grandes, están en una disyuntiva importante, el avance de la soja y la presión de los country que se van sembrando como plaga. Lo que vamos viendo es que hay una pérdida de la autonomía alimentaria en las ciudades. Hoy si nosotros analizamos Ramallo Villa Ramallo como depende de la producción de alimentos de otras regiones, es alarmante”.
El ingeniero avanzó con la pregunta ¿de dónde se abastecen ustedes de la verdura? De Rosario, se respondió. Las imágenes vinieron en el power point mostrando como en una misma pileta donde se lavaba la mochila de los fumigadores se lavaba también la lechuga. La calidad de la verdura si viene de Rosario, según las imágenes difundidas por Terrile no son las mejores. Dignas de una “película de terror” como afirmó mientras explicaba.
La toxicidad que se mide
“No creo en la banda toxicológica, la banda de los colores –esgrimió Terrile- mide la toxicidad aguda. La toxicidad aguda se mide por la dosis letal cincuenta que quiere decir la cantidad de miligramos necesario para que la mitad de una población de ratas en un laboratorio muera-explicó”. Mide la toxicidad aguda, pero no mide la crónica que es la que puede ser que a esa rata le provoque un cáncer que lo va a padecer años. Eso no se está midiendo-continuó- solamente se está midiendo la toxicidad aguda”.
Las derivas tanto en fumigación aérea como terrestre
Raúl Terrile se refirió a los daños que se genera con la deriva y también en la salud por el uso de agrotóxicos tanto en las fumigaciones aéreas como terrestres. “Hay datos que hablan que solamente entre 25% y el 30% de lo que uno aplica da en el blanco. El resto termina en cursos de agua, termina por lixiviación, por volatilización y a veces por las cuestiones de temperatura se evapora y después llega a ver algún viento posterior a la aplicación, esa nube viaja y puede descargar en otro lado. Hay muchas variables a tener en cuenta y que finalmente uno no las mide. Los plaguicidas afectan a la salud de la población. Hoy hay pruebas, estudios y demás, si bien es muy difícil por este tema del largo plazo, medir causas y consecuencias, por eso es tan discutido y tenemos problemas para poder corroborar, pero hay muchos médicos que han podido definir la consecuencia de los plaguicidas en la población, efectos agudos: como respiratorios, dérmicos, oftalmológicos, neurológicos, hepáticos o pulmonares, entre otros. Como también estos crónicos de mediano y largo plazo: abortos, malformaciones, cánceres. Y esto se ha podido corroborar al analizar poblaciones más o menos expuestas y a partir de análisis que se realizaron de dosajes de agroquímicos en sangre, que inclusive en gente que no tiene ningún tipo de contacto se le ha detectado agroquímico en sangre por el tema del consumo”.
“En el Chaco por ejemplo, se ha comparado la curva de uso de agroquímicos con la curva de malformaciones de nacidos vivos, y es la misma curva con total coincidencia entre una y otra. Y esto se le va sumando los nuevos elementos transgénicos que van apareciendo, como ya la soja RR no es tan efectiva, porque aparece la maleza resistente, se crea el otro evento donde se le agrega el 2,4D, muy discutido por ser un disruptor hormonal y en Estados Unidos ha estado como 10 años en seguimientos por sus efectos a la salud”
“Y esto del modelo, nosotros le hemos dado al glifosato sin ningún tipo de control y desde el punto de vista técnico, cero prevención, han aparecido malezas resistentes que generan problemas grandes, el modelo genera otras cosas también”
“Otra cuestión de los fertilizantes químicos es la consecuencia en el cambio climático. El aumento de temperatura se asocia al dióxido de carbono y hay un gas que es el óxido nitroso que es un producto de las emisiones de los fertilizantes químicos nitrogenados. Y donde la FAO advierte que las emisiones agrícolas precedentes de la producción agropecuaria crecieron un 14% en 10 años y que ese incremento se produjo principalmente en los países en desarrollo debido a la expansión de la producción agrícola. Y hacen hincapié en el riesgo del óxido nitroso”.
Propuesta: Producción y ambiente sano
“Pensando en el mar de soja en el que están inmersos los pueblos rurales nosotros decimos no hay que producir con químicos. Porque cabe en la responsabilidad de los gobiernos cuidar la salud de sus habitantes. Alrededor de los pueblos que no exista una zona de uso de plaguicidas, después que exista una de uso de plaguicidas, en forma controlada, con aquello que se llama buenas prácticas agrícolas. Y después será el resto, con un uso consciente, por más alejado del pueblo que estén”.
Producir lo que se consume en los pueblos
“El cinturón periurbano que no sea un castigo, Sea una zona no productiva, sino una producción con mayor cuidado, no significa no producir sino producir de otra manera”.
“Las áreas periurbanas fundamentalmente sean espacios donde se comiencen a promover sistemas locales de alimentos. A mí entender son los lugares donde debería, y hablando de los cambios climáticos, por una cuestión de energía, no tiene sentido con la riqueza en los suelos que tiene la pampa húmeda, estén ustedes yendo ir a buscar la verdura a Rosario. Consumiendo una verdura chatarra. Porque Rosario se abastece de producciones de La Plata, con una carga de kilómetros muy grande. La facultad había hecho un informe donde el 60% de la lechuga se tira porque no se banca el transporte. Nosotros creemos que lo más inteligente sería producir localmente lo que se consume en el pueblo”.
“Y producir alimentos, no solamente hortalizas, se puede producir legumbres, y esto merece un estudio y análisis para saber qué es lo que consumen los pueblos y la región, y a esos productores darles incentivos, premiarlos”.
“Ir hacia la soberanía alimentaria es elegir qué comer, porque muchas veces comemos lo que nos mandan, no lo que queremos”.
En eso reinó la exposición del ingeniero Terrile. Se dio paso al debate, las preguntas, las exposiciones, las posturas de productores que no son lineales, hay de todo, y eso es bueno, de los preocupados, los que buscan información, y los que defienden su producción, y también de ambientalistas, bien marcadas las posturas en los intercambios muy sanos en una democracia en serio que debe debatir estos temas importantes, por más que algunos que desean la paz de los cementerios comiencen su alocución con el famoso “sin ánimo de polemizar…” como creyendo que es correcto el no hacerlo. Por no polemizar, por no discutir, unos pocos deciden el presente y futuro de los demás, porque hablar de presente y futuro, es hablar de salud. También hay una muestra de postura asumida que no es la de estar seriamente preocupado por la salud, sino mas bien por los negocios, como la del concejal Héctor Sbuttoni, preocupado por la cantidad de hectáreas de producción en Ramallo, creyendo que el cambio es mañana, y la propuesta es dejar de producir soja, cuando no es ese el foco, sino el buscar que esas hectáreas que queden en esos campos que lindan con poblaciones, exista en esas franjas otro tipo de producción que no afecte la salud de los demás. Y eso fue lo que algunos de los presentes le remarcaron, “artículo 41 de la constitución” le dijo Manuel Antunes. “Estamos hablando de esas hectáreas donde no se va a sembrar soja, no se va a fumigar, de hacer productivas esas hectáreas no de cambiar el modelo de producción total” le remarcó María José Romero que antes le había expresado algo similar a la intervención del productor e integrante de una de las patronales del agro, cortador de rutas en 2008, Daniel Berdini, preocupado siempre por ese vital asunto del dinero.
Cobertura: Fernando Latrille, periodista de Villa Ramallo